UN1ÓN reporta que con el reciente descubrimiento de una red de antiguos túneles en la capital del estado, se confirman las leyendas que contaban los abuelos sobre pasadizos debajo de la tierra que conectaban diversas partes de la ciudad.
Ahora que se han descubierto los primeros 300 metros de lo que podrían ser 10 kilómetros de túneles, especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) comenzarán a trabajar para intentar responder a todos las preguntas que han surgido.
En primera instancia el investigador del INAH en Puebla, Eduardo Merlo, indicó que no se trata de un túnel, o al menos no fue construido para ese fin, sino de estructuras hidráulicas construidas por los jesuitas en el siglo XVI.
Es decir, se trata de estructuras hechas hace por lo menos 500 años, que pudieron haber servido de trincheras hace 153 años a las tropas mexicanas durante la batalla del 5 mayo en 1862.
El primer secreto que ya fue revelado por Sergio Vergara Berdejo, director de la Gerencia del Centro Histórico y Patrimonio Cultural de la ciudad de Puebla, es que existe una conexión subterránea desde Fuerte de Guadalupe hasta el barrio de Los Remedios, de ahí hacia la iglesia de La Compañía y de aquí al puente subterráneo Bubas, construido en el siglo XVII.
Asimismo, Vergara Verdejo intuye que mínimo son 15 túneles que conectan principalmente al cerro de Loreto y Guadalupe con iglesias y con la Catedral; sin embargo, reconoció que apenas es una teoría que se tendría que comprobar. En diciembre próximo presentará un proyecto integral de rescate.
El túnel de 300 metros de longitud que se halló hace unos días tiene siete metros de profundidad y un mismo tanto de altura con 3.50 metros de ancho. Y aunque la leyenda urbana cuenta que estos pasadizos eran ocupados para el traslado de municiones durante el sitio de Puebla, Vergara asegura que aún no se tiene el dato exacto.
Entre los objetivos de la investigación que ya se planea es descubrir qué elementos integraron la Puebla antigua y con ello determinar qué culturas habitaron este territorio antes de la llegada de los españoles y de su fundación en abril de 1531.
Con base en los nuevos descubrimientos y análisis realizados, los especialistas plantean como hipótesis que debajo de la ciudad que existe actualmente, podrían existir 3 capas ocultas, pero para poder determinarlo, hacen falta 15 años de trabajos en estos túneles.