Cada generación de trabajadores representa diferentes retos para un país, y aquellos mayores de 55 años se enfrentan al de la jubilación.

El Golden Age Index, de PwC,  muestra el impacto que los trabajadores de más de 55 años tienen en el mercado laboral en 34 países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

De acuerdo con el documento, las naciones tienen el reto de fomentar la jubilación más tardía. Para ello es importante crear incentivos financieros para los empleados de la edad de oro,  brindar formación en competencias digitales y alguna forma de actualización basada en aprendizaje, que ayudará a que estas personas permanezcan o vuelvan  a introducirse a  la fuerza laboral.

Suecia, por ejemplo, tiene una de las tasas más altas de empleo de la OCDE para los trabajadores más longevos, en particular entre las mujeres. Esto es el reflejo de una serie de políticas llevadas a cabo desde principios de 1990 para contrarrestar la jubilación anticipada.

Acabar con este problema podría aumentar el PIB hasta en 2.6 billones de dólares en países de la OCDE.

Una de las nuevas medidas que Suecia podría poner en práctica, es hacer deducciones de seguro o de impuestos de nómina nacionales a las empresas que contraten a personas en la edad de oro.

Los países que han dado pasos en esta dirección son Islandia que encabeza la clasificación, seguida por Nueva Zelanda, Suecia, Israel, Alemania y Reino Unido.