Dinero en Imagen informa que en 2015 se detuvo el avance de los indicadores de calidad del empleo que se había observado entre 2013 y 2014, de acuerdo a datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Inegi.
Tasas como la informalidad (trabajadores laborando en unidades económicas sin registro o sin acceso a la seguridad social), la subocupación (necesidad de trabajar más horas por insuficiencia de ingresos) y la tasa de condiciones críticas de ocupación (trabajar más de 48 horas semanales hasta con dos salarios mínimos) aumentaron entre 2014 y 2015.
Expertos consultados por Excélsior coincidieron en estos indicadores muestran que el gran pendiente del actual sexenio es mejorar la calidad del empleo, pues su avance ha sido marginal.
Informalidad
David Kaplan, especialista sénior en Mercados Laborales del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), explicó que durante el sexenio la mayor generación de empleos formales ha reducido la tasa de informalidad en 1.4 puntos porcentuales, pero que el avance observado entre 2013 y 2014 se detuvo en 2015.
La tasa de informalidad de los asalariados, que tenía una tendencia a la baja desde la aprobación de la Reforma Laboral a finales del 2012, subió en 2015. En cambio, la tasa de informalidad de los trabajadores independientes continuó en 2015 su tendencia a la baja que empezó con la aprobación del Régimen de Incorporación Fiscal a finales del 2013. En este sentido, si bien la formalización de pequeñas empresas continuó en 2015, la formalización de los empleados se detuvo”, señaló.
En tanto, Valeria Moy, directora general de México ¿cómo vamos?, señaló que en el país no se ha actuado integralmente para reducir la informalidad, y que programas de incentivos a inscribirse a la seguridad social no son suficientes para combatir los rezagos históricos en la calidad del empleo.
La gente tiene que percibir beneficios tangibles de la formalidad y de pagar impuestos, como cuando usa los servicios del IMSS y lo atienden rápido y con calidad. Además, ver que el gasto público se traduce en mejores servicios públicos y menos corrupción”, expresó Moy.
Acciones
Los especialistas argumentaron que se requieren decisiones de fondo para reducir la informalidad y mejorar el nivel de ingresos.
Primero, una Reforma Fiscal integral que financie una seguridad social universal a través de impuestos al consumo, que reduzca los gravámenes al trabajo, y dé protección a personas en desempleo.
Segundo, mejorar la calidad de los trabajadores activos y de aquellos que se vayan a incorporar al mercado laboral para aumentar su productividad y sus ingresos, a través de mejor educación.
Tercero, focalizar programas para la búsqueda de empleo entre empleadores y trabajadores.
Cuarto, hacer más fácil la declaración y el pago de impuestos, para aumentar el padrón de contribuyentes y de la seguridad social.
Confiamos en que las iniciativas del programa de Formalización del Empleo y de Justicia Laboral de la Secretaría del Trabajo este año vayan en la dirección de reducir los costos de la formalidad para que haya mayor contratación”, planteó David Kaplan.
Debemos dar pasos para convertir la informalidad en ilegalidad. Es difícil, pero se debe dar junto a un mejor uso de los recursos públicos y tener beneficios tangibles de pagar impuestos. No es que la ley borre a los informales, sino que se los empiece a atraer más hacia la formalidad”, expresó Valeria Moy.
