Alrededor del mundo existen construcciones que hoy se han convertido en íconos del turismo. Muchas de ellas destacan no sólo por su belleza sino también por todo el trabajo y dinero que se invirtió en su edificación.
A diferencia del valor histórico que va aumentando con el tiempo, el económico va cayendo conforme avanzan los años. Lo que antes pudo costar millones de dólares en armarse, hoy puede hacerse con mucho menos dinero gracias a la tecnología y facilidad para conseguir el material.
Tal vez eso te hará apreciar un poco más la verdadera esencia de estos destinos.
Gran Pirámide de Giza. No se tiene un conocimiento exacto de cuánto costó construirla pero lo que sí se sabe es que tardó casi 30 años en terminarse. La piedra caliza era trabajada a mano, colocada y pulida por los miles de hombres que se encargaron de la edificación. Haciendo un aproximado, el costo actual sería de unos 878 millones 250 mil dólares, dividido en el precio de la piedra, la mano de obra y la maquinaria.
Torre Eiffel. Del máximo atractivo de París sí tenemos información. Sabemos que su construcción tardó 2 años, entre 1887 y 1889, y se necesitaron 36 millones de dólares especialmente para adquirir el acero necesario. Sin la ayuda de las grúas, los trabajadores debieron unir todas las piezas y pintarla a mano en el mismo lugar. Hoy armar la torre tendría un costo de 31 millones 184 mil 900 dólares, gastando el dinero en remaches, acero, focos, pintura y mano de obra.
Cristo Redentor. La estatua Art Decó más importante del mundo es una excepción a la regla pues su precio aumentó en lugar de disminuir. Luego de cinco años de trabajo, el Cristo abrió sus brazos en 1931 sobre el Cerro Corcovado en Río de Janeiro con una inversión de 250 mil dólares. Sin embargo, ajustando la inflación actual, se hubiera necesitado 1 millón 456 mil 777 dólares para comprar los materiales como la piedra, el concreto y las esteatita con la que se cubrió toda el exterior.
Big Ben. A diferencia de lo que muchos creen, el Big Ben no es el nombre del reloj de la torre del Palacio de Westminster sino de la campana que está dentro de ella. Construirla en 1858 tomó aproximadamente un mes pero ésta se dañó y se tuvo que hacer una segunda campana, ambas con un costo de elaboración de 392 mil 766 dólares. En la actualidad, el precio total sería de 222 mil 278 dólares.
Torre de Pisa. Pese a lo inestable del terreno, en 1173 se inició la construcción de esta torre en la localidad italiana de Pisa, la cual duró 800 años. Con el tiempo, el edificio se fue inclinando y requirió de trabajos adicionales para impedir que se siga moviendo. Aunque no se conoce el precio inicial de la construcción, se estimó el costo actual basándose en una réplica de la original, obteniendo la cifra de 4 mil 100 millones de dólares. Lo más caro de todo fue el mármol necesario para decorar el exterior.
Coliseo. La imponente construcción en Roma impacta al mundo desde el año 80 d.C. En este caso tampoco se conoce el costo del edificio pero sí se sabe que los romanos tardaron menos de 10 años en terminarlo y es uno de los máximos exponentes de la arquitectura durante el imperio. Hoy realizar un Coliseo similar tendría un precio de 380 millones de dólares invertidos en el travertino que se usó para construirlo y la mano de obra.
Estatua de la Libertad. Llegó a Nueva York desde Francia como un regalo de dicho país para conmemorar el centenario de la independencia estadounidense. "Lady Liberty" tiene una altura de 93 metros sumándole el pedestal y el conjunto costó unos 10 millones de dólares en 1886. La estimación del precio actual es de 1 millón 283 mil 520 millones de dólares, monto necesario para comprar materiales como cobre, acero y concreto.