1. Viaja cuando sea más barato

El precio de los vuelos varía considerablemente en función del mes, día e incluso hora del viaje. Skyscanner te permite comparar precios de vuelos durante todo un mes o todo el año, de manera que podrás ver qué días es más barato volar. Te ahorrarás mucho dinero.

Evitar los fines de semana tiene un gran impacto en el precio del vuelo. ¿Por qué no comparar trayectos de miércoles a miércoles en vez de viernes a viernes? Con el motor de búsqueda de Skyscanner podrás obtener una gráfica con los días más baratos de la semana para viajar.

2. Viaja en temporada baja

Si puedes evitarlo, no vayas a Australia en Navidad o a Italia cuando empiezan las vacaciones de verano, en pleno mes de agosto. Si viajas fuera de temporada sin duda encontrarás mejores ofertas. En gran parte de Europa todavía hace buen tiempo en septiembre, y con la vuelta al cole de los niños los vuelos serán más baratos y tu destino estará menos abarrotado.

3. Vuela con escalas

Si te importa más el dinero que el tiempo, puedes plantearte viajar haciendo escalas. Skyscanner te permite buscar rutas indirectas (y también directas), que a menudo son una opción más económica.

4. Reserva el estacionamiento en el aeropuerto

Si necesitas dejar el coche en el aeropuerto durante tu viaje, asegúrate de reservar el aparcamiento con antelación. Hacer la reserva el mismo día suele ser más caro.

5. Tráete la comida de casa

Hoy en día muchas aerolíneas cobran por la comida que ofrecen a bordo. Ahórrate una pequeña fortuna y tráete tus propios tentempiés en vez de comprarlos en el avión o en el aeropuerto.

6. Dale una patada al exceso de peso

Si te preocupan los cargos por exceso de equipaje, ¿por qué no te pones las prendas que te sobran en vez de meterlas con un embudo en la maleta? Hay algunos productos fantásticos en el mercado que te permiten transportar contigo objetos personales asegurándote que no contarán como exceso de equipaje. Una chaqueta con compartimentos secretos combinada con una maleta de máxima capacidad a bordo te asegurará que puedes llevar el máximo permitido en el avión sin tener que pagar ningún coste extra.

7. Pesa el equipaje antes de salir de casa

Algunos de nosotros llegamos al aeropuerto y nos damos cuenta de que superamos el límite de peso y tenemos que pagar precios inflados por ello. Puedes evitarlo si pesas tu maleta antes de salir de casa y quitas cualquier objeto innecesario si realmente te pasas de peso.

8. Intercambio de casas

Si quieres ir de vacaciones pero estás harto de las típicas cadenas hoteleras y de habitaciones caras y sin alma, ¿por qué no te planteas un intercambio de casa? Te costará prácticamente nada, es lo que tiene la palabra "intercambio", y podrás visitar un país nuevo mientras gozas de todas las comodidades de un hogar.

9. Olvídate del hotel y alquila una habitación privada

Durante los últimos años ha habido un boom de páginas web que permiten a la gente de una zona alquilar su sofá, habitaciones libres, todo un apartamento ¡e incluso jardines! Para el viajero, la experiencia puede ser mucho más gratificante que alojarse un una cadena de hoteles, y además más barato.

10. No renuncies al glamur

Destinos potencialmente caros como París o Nueva York no tienen por qué serlo para el que tiene un presupuesto ajustado. Hay muchas maneras de codearse con los ricachones sin gastar como ellos; los hoteles baratos, albergues y restaurantes de buena relación calidad-precio permiten al viajero modesto gozar de una visita a esos destinos.