Un petate tejido con bagazo de caña se convierte en el mejor colchón y en el único objeto que decora la cuevaña. Nos han prestado un sleeping para no pasar frío y unas veladoras para alumbrar esta habitación ecológica en forma de iglú.
A través de la ventana, cubierta con malla mosquitera, podemos escuchar el despertar de fauna nocturna, desde la sinfónica de grillos hasta los chillidos de los murciélagos. También escuchamos el cauce del río, éste pasa por nuestra cuevaña como un pequeño arroyo.
Estamos en Tosepan Kali, un desarrollo ecoturístico creado y operado por indígenas nahuas, a 10 minutos del centro de Cuetzalan, Puebla, que se dieron la tarea de construir cinco cuevas forradas de bambú. Cada una se esparció en la rivera del Cuichat y para no alterar el medio ambiente, decidieron dejar dentro de ellas piedras y raíces que ahora hacen las veces de mesas y bancos.
A pesar de su forma pequeña, uno puede ponerse de pie sin el riesgo de golpearse la cabeza con el techo; caben de dos hasta seis personas. Los baños y regaderas son comunitarios y se localizan muy cerca de cada cuevaña.
La aventura
Durante nuestra estancia en Tosepan Kali, emprendimos un recorrido por la Ruta del Piloncillo. Visitamos cañaverales para extraerles sus jugos hasta obtener los conos macizos de piloncillo, conocimos un refugio de aves migratorias, la zona arqueológica de Yohualichan, comimos en la casa de un productor de café y por último, recorrimos un vivero de plantas medicinales con todo y mariposario.
Al otro día, fuimos a la Ruta del Algodón, donde mujeres se encargaron de enseñarnos a formar los hilos, teñirlos con pintura natural y hasta el proceso de tejido, el cual todavía hacen utilizando telares de cintura.
La miel y la canela son los productos más utilizados por la cooperativa, ayudamos a cosecharlos para utilizarlos en el desayuno y para elaborar champús, jabones, cremas y dulces que venden dentro del mismo Tosepan Kali.
Cómo llegar
Desde la Terminal Tapo, la línea de autobuses Coordinados cubre la ruta en cinco horas, aproximadamente. Boleto sencillo: 348 pesos. La primera corrida desde la Ciudad de México sale a las 9 de la mañana.
Desde la Capu hay salidas desde las 6 de la mañana en la línea Vía, con un recorrido de tres horas aproximadamente.
Tarifa
Cuevaña: 350 pesos por noche por persona. Incluye tres alimentos y recorridos a cascadas. http://tosepankali.com