1. Acolman, Estado de México (para comprar piñatas)
De acuerdo con la tradición, fue en los salones y patios del Ex Convento de San Agustín de este Pueblo con Encanto mexiquense que, en la Colonia, se comenzaron a elaborar las primeras piñatas en territorio nacional. Por ello, en la plaza principal, cada año se realiza una colorida feria en la que la protagonista es esta antes rústica olla que, cubierta ahora de papeles china o lustre y decorada con siete picos (según algunas versiones evocando a los “Siete Pecados Capitales”), se ha convertido en parte primordial de las celebraciones navideñas en México. De hecho, romperla después del “dale, dale, dale…” durante las posadas es el momento cumbre de la fiesta desde la época virreinal.
Cómo llegar: Acolman se localiza a 40 km al noreste de la Ciudad de México siguiendo por la autopista México-Pirámides.
No te puedes perder: La Feria de la Piñata 2014. Del 13 al 21 de diciembre.
2. Chignahuapan, Puebla (para comprar esferas)
Ubicado al noroeste de la entidad poblana, este Pueblo Mágico es un verdadero paraíso para comprar esferas (durante todo el año) de todos tamaños, formas y colores. Esta tradición, que primordialmente consistía en dominar la técnica del vidrio soplado para después adicionar color, aplicaciones y motivos varios, llegó a Chignahuapan de la mano de familias michoacanas (Rafael Méndez fue el fundador del primer taller de esferas en este poblado). ¡En la actualidad existen más de 200 talleres en los que se fabrican alrededor de 70 millones de estos adornos navideños a precios de locura!
Durante tu visita a este rincón de Puebla aprovecha para conocer su templo que aloja la fantástica imagen de la Virgen de la Inmaculada Concepción (¡de 14 metros!) y disfrutar de la hermosa laguna donde se pueden practicar todo tipo de actividades y deportes acuáticos.
Cómo llegar: Chignahuapan se localiza a 190 km al noreste de la Ciudad de México siguiendo por la autopista México-Pirámides, México-Tuxpan y salida a Chignahuapan.
No te puedes perder: La compra de esferas durante todo el año.
3. Tlalpujahua, Michoacán (para comprar más esferas)
Tlalpujahua es uno de los ocho Pueblos Mágicos que puedes visitar en suelos michoacanos. Su fama de debe a que aquí, desde la época prehispánica, sus artesanos han dado vida a increíbles trabajos artesanales. Entre ellos están las piezas cubiertas con plumas de aves (arte plumario) y, desde finales del siglo pasado (más de 30 años), el proceso de diseñar, crear y decorar esferas navideñas bajo la técnica del vidrio soplado. En nuestros días, de sus talleres, particularmente los del barrio de Tlalpujahuilla, ubicado en el camino hacia el Pueblo Mágico mexiquense de El Oro, salen millones de piezas que se venden en almacenes de reconocido prestigio en la capital del país, incluso más allá de nuestras fronteras. ¿Cómo lo ves?
Durante tu escapada a Tlalpujahua no dejes de admirar los hermosos paisajes que ofrece la presa Brockman, ideal para descansar o bien para practicar deporte de aventura como el senderismo o los paseos a caballo o en cuatrimoto.
Cómo llegar: Tlalpujahua se localiza a 170 km al noroeste de la Ciudad de México siguiendo por la autopista México-Toluca, desviación libramiento Toluca (a la altura de Lerma) hacia Atlacomulco, entronque Temascalcingo-Tlalpujahua.
No te puedes perder: La Feria de la Esfera. Del 2 de octubre al 14 de diciembre.
4. Tepotzotlán, Estado de México (para disfrutar la Pastorela más famosa de México)
Tepotzotlán es un Pueblo Mágico ideal para disfrutarse cualquier fin de semana. Sin embargo, durante esta temporada, la Hostería del Convento (uno de los tres espacios que integran el complejo del Ex Convento de San Francisco, junto con el Museo Nacional del Virreinato y el Templo de San Francisco Javier) aloja uno de los espectáculos navideños más importantes de la región: las Famosas Pastorelas de Tepotzotlán, que este año cumple 50 años presentándose con rotundo éxito. El espectáculo consiste en la tradicional representación del camino de los pastorcitos hacia el portal de Belén para conocer al Niño Jesús, mientras un grupo de demonios, encabezados por el Diablo Mayor, intentan evitarlo a toda costa. De las Famosas Pastorelas te podemos decir que su reparto es de primer orden y que una vez terminada la obra podrás convivir con el elenco mientras participas de una posada y disfrutas de un rico ponche y deliciosos antojitos mexicanos. Para los capitalinos, una escapada a Tepotzotlán es una gran oportunidad para vivir la magia de la Navidad “con acento mexicano”.
Cómo llegar: Tepotzotlán se localiza a 40 km al norte de la Ciudad de México siguiendo por la carretera México-Querétaro, desviación antes de llegar a la Caseta de Tepotzotlán.
No te puedes perder: Las Famosas Pastorelas de Tepotzotlán 2014. Del 14 al 23 de diciembre.
5. Ciudad de Oaxaca, Oaxaca (para admirar esculturas hechas con rábanos)
¿Qué te parecería deambular por las calles de la hermosa ciudad colonial de Oaxaca y de pronto encontrarte con una fiesta en donde los rábanos (sí, esos tubérculos de color rojizo) son los principales protagonistas? Desde finales del siglo XIX, en el centro de la capital oaxaqueña tiene lugar la original Noche de los Rábanos. Tiene sus orígenes cuando las autoridades de aquella época notaron que en las esquinas de los puestos que conformaban un antiguo mercado temporal que se ponía en la ciudad para proveer de los productos para la cena de Navidad a los habitantes de la antigua Antequera, los vendedores colocaban figuras hechas con rabanitos o coliflores. Al descubrir que estos elementos le daban un toque divertido a los locales del mercado, los gobernantes decidieron formalizar la vendimia (de manera anual) y llevar la práctica de esculpir rábanos y otros frutos del mundo vegetal a nivel de un concurso que se extendería hasta nuestros tiempos.
En la actualidad, un jurado es el encargado de elegir de entre un gran universo de piezas que representan a alguna figura o escena tradicional de la entidad oaxaqueña o de la época decembrina, a la más original o de difícil manufactura antes de las 10:00 de la noche. La realización de esta fiesta -en la que incluso carpinteros y talladores de madera se han negado a participar por la complejidad que requiere-, indica a los oaxaqueños la inminente llegada de la Navidad en la Ciudad Patrimonio.
Cómo llegar: Oaxaca se localiza a 480 km de la Ciudad de México siguiendo por la autopista México-Puebla, Puebla-Oaxaca.
No te puedes perder: La Noche de Rábanos 2014. 24 de diciembre, a partir de las 17:00 hrs.
Fuente: http://www.mexicodesconocido.com.mx/destinos-navidad-mexico.html