CNNExpansión informa que hace cinco años el periodista Humberto Padgett se dio cuenta que no lo querían las aseguradoras. Cuando la revista en la que trabajaba dio de baja del IMSS a sus empleados, buscó infructuosamente contratar un seguro de gastos médicos mayores.
El problema surgió cuando en el proceso de solicitud le preguntaron qué fuente cubría en su labor periodística y él respondió con la verdad, crimen organizado e inseguridad. “(Me dijeron) que mi trabajo representa mucho riesgo y que la aseguradora no contempla pólizas para periodistas con una cobertura como la mía”, comentó Padgett.
Periodistas, ingenieros, arquitectos, policías, pilotos de autos de carreras, boxeadores, luchadores, toreros y futbolistas son algunas profesiones y oficios que no son sujetos de contratar una póliza de seguro de gastos médicos mayores o de vida.
La razón es sencilla: las actividades que realizan implican un alto riesgo que las aseguradoras no quieren asumir. Si deciden hacerlo, es muy probable que fijen cláusulas estrictas de exclusión, topes en los montos de las sumas aseguradas o extra primas, dijo el asesor de seguros Eloy López.
El riesgo de un asegurado se determina con base en su profesión, actividades físicas que realice o deportes extremos, amenazas a las que esté expuesto y la frecuencia con que se expone a ellas, el lugar donde vive, dónde trabaja, su estado de salud y el tipo de gente con la que se relaciona, explicaron expertos.
Entre las principales actividades de riesgo que podrían generar exclusiones o extra primas están: el uso de armas de fuego, explosivos, sustancias químicas, material biológico, exposición a radiaciones, uso de motocicleta, practicar deportes extremos como motociclismo acuático, equitación, charrería, paracaidismo o buceo, detalló el asesor de seguros Adolfo Vargas.
Periodistas que cubran narcotráfico, seguridad o política no son asegurables. “Hay algunas actividades como la de los periodistas que no tienen horarios, por lo tanto todo el tiempo están expuestos al riesgo”, dijo Eloy López.
En cambio los futbolistas profesionales pueden acceder a un seguro de gastos médicos pero con una extra prima del 15% y en seguro de vida, la aseguradora no pagará si la muerte es durante su participación en la cancha de juego, ejemplificó López.
Una póliza que cubre muerte accidental y gastos médicos por accidente de un boxeador por 200,000 pesos, puede tener una extra prima del 4 al 6% si es colectiva, pero si es individual el costo extra podría ser del 100% de la prima original, según datos de una cotización realizada por el asesor de seguros Sergio Betanzos.
Tú sí, tú no... el proceso de selección
Cada aseguradora tiene sus propios parámetros de selección y todas tienen el derecho de seleccionar a sus clientes y decidir libremente si aceptan o no el riesgo, sin considerarse a esto discriminación.
“La Ley de Instituciones de Seguros y Fianzas solo advierte que la aseguradora no podrá asumir un riesgo tan elevado que pueda vulnerar a la colectividad, es decir a los demás asegurados”, explicó el director general del despacho Defensa Segura, Alejandro García.
El proceso de selección de clientes es como pasar por “una caja negra”. En un periodo de 3 a 5 días, dependiendo la complejidad del riesgo que enfrenten los clientes, serán sometidos a una investigación que realizan médicos y actuarios.
Durante ese periodo el cliente es sometido a un examen médico, la aseguradora confirma su reputación, y comprueba que no se encuentre en la lista negra de personas acusadas o vinculadas con el lavado de dinero, narcotráfico o delincuencia organizada
“Los lineamientos de selección de riesgo son diferentes para cada caso, dependen de cada aseguradora, su experiencia y el cliente”, agregó Adolfo Vargas.
El proceso de selección de riesgos puede ser tan minucioso como tan alta sea la cantidad de la suma asegurada.
Hasta el momento, la exclusión de profesionistas y clientes con alto riesgo no ha sido motivo de demandas, pero los expertos dicen que las aseguradoras deberían aceptar a este tipo de clientes con primas altas que les ayuden a mitigar el peligro de un posible siniestro.
¿Cómo protegerse?
1. Si no eres sujeto de un seguro pide a varias aseguradoras que hagan una segunda evaluación de tu caso, explícales con detalles qué actividades realizas. “Si eres un arquitecto o ingeniero que no trabaja directamente en una obra o construcción eres un sujeto asegurable”, dijo Sergio Betanzos.
2. Es importante que cada vez que estés bajo la amenaza de un nuevo riesgo le avises a la aseguradora. “Si la muerte sucede después de dos años de haber contratado el seguro de vida, la aseguradora no deberá pagarte sin investigar el caso”, dijo Sergio Betanzos.
3. Haz un fondo de ahorro que te permita responder ante emergencias de salud o que cubra tus gastos en caso de muerte o invalidez si no tienes seguro.