Tras debacle, priístas de Puebla piden la cabeza de Jorge Estefan

Por  Staff Puebla On Line | Publicado el 07-06-2016

Es necesaria una reestructuración en el Comité Directivo Estatal del PRI en Puebla, que encabeza el diputado federal Jorge Estefan Chidiac, para que en 2018 no se repita la derrota del pasado 5 de junio, señaló el delegado de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Juan Manuel Vega Rayet, del grupo del subsecretario de la Sedatu, Juan Carlos Lastiri Quirós.

Vega Rayet no se anduvo por las ramas. Expresó:

“Necesitamos un dirigente estatal para que se ponga a trabajar en este momento. Me queda claro que tiene que haber una reestructuración inmediata, una reestructuración en el Comité Directivo Estatal. Ahí están los resultados y el Comité Directivo Estatal fue quien llevó el proceso”, dijo.

El delegado de la Sedesol, quien ha sido dirigente del PRI en el estado, dijo que si bien todos los priístas fueron responsables de la derrota de Blanca Alcalá, la dirigencia estatal fue la que tuvo el mayor peso debido a que fue la que llevó las riendas del proceso.

El pasado 5 de junio, a excepción de Izúcar de Matamoros, Acatlán de Osorio, Zacapoaxtla y Tlatlauquitepec, el candidato de la alianza "Sigamos Avanzando", Tony Gali Fayad, se alzó con el triunfo en el resto de los 26 distritos electorales del estado de Puebla, lo que consolidó su victoria con una diferencia de 12 puntos sobre la priísta Blanca Alcalá, quien además fue arrasada en la capital de la que fue presidenta municipal en el periodo 2008-2011.

En los siete distritos de la ciudad de Puebla el ex edil Tony Gali obtuvo un total de 212 mil 148 votos, por 121 mil 873 de Blanca Alcalá; una diferencia de 90 mil 275 a favor del candidato del PAN-PANAL-PT-PSI-CPP.

Por si fuera poco, con apenas 596 mil 865 votos, Blanca Alcalá Ruiz ha sido la peor candidata del PRI desde 1998, superada por Mario Marín Torres, Javier López Zavala y Melquiades Morales Flores.

Lejos quedó la afirmación del dirigente estatal del PRI, Jorge Estefan Chidiac, de que Alcalá obtendría más de un millón de votos. Y es que no sólo no los logró, sino que quedó muy rezagada respecto a los últimos tres candidatos del tricolor a Casa Puebla.

En 1998, Melquiades Morales obtuvo 760 mil 939 votos, suficientes para convertirse en gobernador. En 2004, Mario Marín alcanzó 886 mil 535 votos, con los que ganó la gubernatura. En 2010, Javier López Zavala sumó 883 mil 285, insuficientes para vencer en las urnas al actual mandatario, Rafael Moreno Valle.

En otras palabras: Blanca Alcalá resultó un fiasco como candidata del PRI.

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